Lugar conocido por el nombre de castillo, donde se cree que se situaba la fortaleza.
A San Simón y San Judas Tadeo se les celebra la fiesta el mismo día porque según una antigua tradición los dos iban siempre juntos a todas partes a predicar la Palabra de Dios.
Sancho Ramirez tomando juramento a sus hijos que más terde conquistarán Huesca.
La documentación conservada sobre nuestros orígenes, como ya sabemos, es muy escasa. Los historiadores descifran los datos reconstruyendo el pasado intentando descubrir un antiguo misterio: nuestra identidad. En este texto, rescatado de “ La localización de antiguas iglesias aragonesas”, D. Federico Balaguer (Huesca) y D. Virgilio Valenzuela (Teruel) nos lanzan sus hipótesis y conjeturas sobre los escritos más antiguos de nuestro pueblo, acercándonos las reflexiones que tantos investigadores han tenido con anterioridad.
Manuel Puyuelo Ortiz
FEDERICO BALAGUER Y VIRGILIO VALENZUELA
IGLESIA DE SAN SIMÓN Y SAN JUDAS DEL CASTILLO DE LABATIELLA
Entre las donaciones otorgadas por el monarca aragonés Sancho Ramírez al monasterio de Saint Pons de Thomières, en mayo de 1093, figura la de la iglesia del castillo de Labatiella dedicada a los santos Simón y Judas: similiter dono illam eclesiam apostolorum Christi Simoni et Jude de Castro quod dicitur Làvatiella, con todas sus iglesias y capellanías, décimas, primicias, derechos de cementerio, todas sus pertenencias, aloidos, añadiendo las décimas, primicias, obligaciones y alodios de ipsis eclesiis et uilis que ad predictum castrum trasmigrauerunt, es decir de las iglesias de Morrano, Yaso, Bastaras y Panzano; como se ve en la donación no incluía el dominio temporal del castillo ni de las villas.
Ahora bien, ¿dónde se hallaba el castillo de Labatiella? Generalmente lo hemos venido identificando como el castrum Labata, pueblo situado junto al río Formiga, pero sin base documental. Creemos que debe replantearse este problema, todavía no resuelto. Empezaremos por dar una somera noticia de ambas fortalezas: Labatiella y Labata.
EL CASTILLO DE LABATIELLA.- La mención más antigua que conocemos es la de un documento de 1092, en la que aparece García Fortuñones como señor in lauatiella. En esta época, este castillo debía tener cierta importancia militar y, según la donación de 1093, dependían de él las villas de Yaso, Morrano, Bastaras y Panzano. Años más tarde, en mayo de 1097, Frotardo, abad de San Ponce, dejaba a Vestiendos, Fratres Thomerienses los frutos de la honor que había concedido al monasterio Sancho Ramírez y mencionaba también la iglesia de Labatiella. También la menciona, en el mismo año, un documento del obispo Pedro ratificando la donación de Sancho Ramírez. A partir de esta fecha, 1097, no conocemos menciones de Labatiella.
CASTILLO DE LABATA.- Más abundantes son las noticias que tenemos sobre Labata. Se le mencionan documentos de Sancho Ramírez; en 1097, aparece bajo el dominio de Forti Ortiz y Galindo Dat. En 1101, son tenentes Fortum Sánchez y Galindo Dat; la villa debería de estar murada, pues en documento de esta fecha se habla de illo muro. Durante la mayor parte del reinado de Alfonso el Batallador la tenencia es ejercida por Juan Galíndez hasta 1134, fecha en que desaparece este caballero, acaso por haber muerto en la batalla de Fraga, sucediéndole su hijo Sancho Juanez, mencionado todavía en documento de 1149, al que sigue Galindo Naya. El último señor de Labata durante el siglo XII parece ser Sancho de Orta, mayordomo de Alfonso II. Finalmente, Labata pasó a formar parte de la encomienda de Barbastro de la orden de San Juan de Jerusalén. Un documento de hacia 1149 nos da a conocer el nombre de alguna de las potestades de Labata, Don Sancho, señor en Antillón y en Labata y Albin, Amirad en esta última localidad, en Yaso y en Bastaras. El castillo se hallaba en lo alto del pueblo.
TENENTES Y OTROS CARGOS DE LABATA Y LABATIELLA.- Con objeto de poder tener una base de comparación, damos a continuación la lista de tenentes de ambas fortalezas conocidos actualmente. Es la siguiente:
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LABATIELLA.
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García Fortuñones------------------1092
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LABATA
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Galindo Dat y Forti Ortiz------------1097
Galindo Dat y Fortún Sánchez-------1101
Juán Galíndez-------------------------1124-1134
Sancho Juanez------------------------1135-1153
Galindo Naya--------------------------1168-1188
Sancho de Orta------------------------1191
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Como se ve, las menciones no son sincrónicas; cuando comienza a citarse la tenencia de Labata deja de aparecer la de Labatiella; pero cualquier conclusión que quisiéramos sacar de este hecho sería, quizá, prematura.
A la vista de los datos expuestos, resulta aventurada intentar la identificación de Labatiella. Por una parte, el hecho de que conozcamos, al menos, por hoy, los primeros tenentes de Labata cuando dejan de citarse los de Labatiella, parece abonar la identidad de ambos lugares. Es más, un documento de Ramiro II, de 1137, está fechado en catrum lauata, en agosto, al parecer, cuando el monarca se dirigía a Barbastro a entrevistarse con Ramón Berenguer IV y conocida la afición del monarca aragonés por alojarse en los lugares del priorato de San Pedro, que poseía en Labata extensas eredades, nos inclinaríamos a sostener la mencionada tesis, si no hubiese también serias razones en contrario, la principal el hecho de que Pedro I concediese, en documento de finales del siglo XI, la iglesia de Labata al monasterio de Montearagón, precisamente por los mismos años en que el templo de Labatiella aparecía como posesión de San Pedro el Viejo, lo que parece indicar que ambas iglesias son distintas.
Por todo lo expuesto, nos limitamos a exponer este problema, esperando que nuevas aportaciones documentales permitan resolverlo con exactitud.
Como se ve, las menciones no son sincrónicas; cuando comienza a citarse la tenencia de Labata deja de aparecer la de Labatiella; pero cualquier conclusión que quisiéramos sacar de este hecho sería, quizá, prematura.
A la vista de los datos expuestos, resulta aventurada intentar la identificación de Labatiella. Por una parte, el hecho de que conozcamos, al menos, por hoy, los primeros tenentes de Labata cuando dejan de citarse los de Labatiella, parece abonar la identidad de ambos lugares. Es más, un documento de Ramiro II, de 1137, está fechado en catrum lauata, en agosto, al parecer, cuando el monarca se dirigía a Barbastro a entrevistarse con Ramón Berenguer IV y conocida la afición del monarca aragonés por alojarse en los lugares del priorato de San Pedro, que poseía en Labata extensas eredades, nos inclinaríamos a sostener la mencionada tesis, si no hubiese también serias razones en contrario, la principal el hecho de que Pedro I concediese, en documento de finales del siglo XI, la iglesia de Labata al monasterio de Montearagón, precisamente por los mismos años en que el templo de Labatiella aparecía como posesión de San Pedro el Viejo, lo que parece indicar que ambas iglesias son distintas.
Por todo lo expuesto, nos limitamos a exponer este problema, esperando que nuevas aportaciones documentales permitan resolverlo con exactitud.
